La decisión anunciada por el presidente Javier Milei de retirar a Argentina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) continúa despertando fuertes críticas y un amplio debate jurídico.

Expertos advierten que la medida no solo sería inconstitucional si se intentara ejecutar por decreto, sino que también podría dejar al país en una situación de vulnerabilidad frente a futuras emergencias sanitarias globales, como nuevas pandemias. 

El anuncio, realizado el pasado 5 de febrero, sorprendió a la comunidad internacional y encendió alarmas dentro del país. Según constitucionalistas, Argentina no puede abandonar la OMS de manera unilateral, ya que el tratado de adhesión debe ser revisado y aprobado por el Congreso.

“La única vía constitucionalmente válida sería a través del Congreso Nacional, lo que complica significativamente la posibilidad de una salida exprés”, explicó un especialista citado por medios locales. El vocero Manuel Adorni lo anunciaba en conferencia de prensa.

🚨 | ARGENTINA SE RETIRA DE LA OMS

“Junto al gobierno de Alberto Fernández nos llevaron al encierro más largo de la historia de la humanidad”. pic.twitter.com/r4JhGBX0rm

— Los Herederos de Alberdi (@LHDA16) February 5, 2025

¿Qué opinan los juristas?

De acuerdo con juristas, intentar avanzar únicamente por decreto abriría un frente judicial complejo, donde la Corte Suprema podría declarar la medida inconstitucional.

“Cualquier intento de retiro de la OMS por decreto sería jurídicamente inválido y sujeto a impugnación en sede judicial y legislativa”, advirtió un abogado constitucionalista. 

Más allá de los obstáculos legales, los expertos en salud subrayan los riesgos prácticos que implicaría la salida. Argentina quedaría excluida de la coordinación internacional frente a crisis sanitarias, de programas de prevención de enfermedades y de las normas que rigen la cooperación global.

También perdería acceso a información clave y a apoyo logístico en escenarios de emergencia, como vacunas, suministros médicos y asistencia técnica. 

“No podemos estar fuera de la conversación de la agenda sanitaria global, sobre todo después de la crisis del Covid-19. Futuras epidemias o pandemias son amenazas reales y requieren un marco de respuesta global”, señaló el exsecretario de Salud Adolfo Rubinstein. 

Mientras tanto, el Congreso y la justicia se preparan para revisar la viabilidad legal de la decisión, en medio de un clima de creciente incertidumbre política y sanitaria.