Con 25 productos aprobados en 2024, el país fortalece su posición mundial en biotecnología agropecuaria e industrial, impulsada por ciencia y políticas públicas.
2024 quedará marcado como un año de récords en biotecnología para Argentina, donde la innovación agropecuaria se convirtió en un estandarte de progreso.
Con la aprobación de 25 nuevos productos por parte de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, el país alcanzó la cifra más alta de autorizaciones en casi tres décadas, lo que representa un 24,53% de todas las aprobaciones acumuladas desde el inicio de los registros.
Este hito supera ampliamente el récord anterior de 16 productos en 2018, consolidando a Argentina como líder global en este campo.
La biotecnología, disciplina que combina biología y tecnología para aprovechar organismos vivos con fines productivos, ha transformado áreas clave como la medicina y la agricultura. Sus aplicaciones van desde vacunas innovadoras hasta cultivos resistentes a climas extremos.
En este contexto, Argentina implementó una estrategia de agilización de procesos regulatorios para microorganismos, cultivos y vacunas genéticamente modificadas.
Instituciones como la CONABIA y el SENASA juegan un rol crucial al garantizar seguridad ambiental, inocuidad alimentaria y beneficios comerciales de cada desarrollo.
Entre las novedades más destacadas de 2024 figuran levaduras bioingenierizadas para optimizar la producción de bioetanol y vacunas transgénicas para prevenir enfermedades en porcinos y aves.
Estos avances no solo fortalecen la productividad agropecuaria, sino que también muestran cómo la biotecnología ofrece soluciones sostenibles a desafíos globales.
El impacto de este liderazgo trasciende lo científico. Argentina logró un récord de exportaciones de semillas biotecnológicas —particularmente de maíz y soja en contraestación— que dinamizaron la industria semillera local y aportaron divisas a la economía nacional.
En paralelo, la edición genética CRISPR y microorganismos diseñados para usos ambientales demuestran que el país acompaña la vanguardia internacional.
En palabras de expertos, este año histórico refleja la sinergia entre ciencia, tecnología y políticas públicas. Al cerrar 2024 con 25 nuevos productos aprobados, Argentina confirma que la biotecnología, apoyada también en herramientas de inteligencia artificial, no es solo una promesa de futuro, sino un recurso estratégico para enfrentar los desafíos del presente y proyectar un crecimiento sostenible en el mundo.
