El Gobierno de Australia anunció la construcción del que será el mayor recinto de energía solar del planeta, ubicado en el remoto norte del país.

La instalación, conocida como SunCable, tendrá una capacidad instalada de cuatro gigavatios por hora destinados al consumo doméstico y otros dos gigavatios para su venta a Singapur. 

Tanya Plibersek, ministra de medio ambiente, destacó que la central solar abastecerá a tres millones de hogares y posicionará a Australia como líder global en energías renovables. Además, el proyecto generará 14.300 nuevos empleos en la región, fomentando el desarrollo económico local. 

El recinto se desplegará sobre 12.000 hectáreas en el Territorio del Norte, beneficiándose de una radiación solar óptima para maximizar la producción energética. Mike Cannon-Brookes, magnate tecnológico y activista ecológico, respalda la iniciativa, que combina innovación tecnológica con compromiso ambiental. 

Opinión de los expertos

Expertos en energía señalan que la instalación es innovadora por contemplar la exportación de electricidad a gran escala. Ken Baldwin, director del Instituto de Cambio Energético de la Universidad Nacional Australiana, destacó que Australia cuenta con recursos solares y eólicos excepcionales, y que proyectos como SunCable aceleran la transición hacia un modelo energético más limpio y sostenible. 

Amanda McKenzie, directora ejecutiva del Consejo Climático, calificó el proyecto como un paso crucial para transformar a Australia en una potencia de energía limpia.

La venta de electricidad a Singapur no solo representa un avance económico, sino también un ejemplo de cooperación internacional en la lucha contra el cambio climático. 

SunCable reafirma el compromiso de Australia con la innovación, la sostenibilidad y la creación de infraestructura energética que contribuya al cuidado del medio ambiente, al tiempo que fortalece la posición del país en la transición global hacia energías renovables.