Trump y Starmer anunciaron un acuerdo de 205 mil millones de dólares que impulsará la cooperación tecnológica y nuclear entre Estados Unidos y el Reino Unido.
Estados Unidos y el Reino Unido firmaron este jueves un ambicioso acuerdo que combina cooperación nuclear y tecnológica, con inversiones que superan los 205 mil millones de dólares, en un evento celebrado en la histórica mansión de Chequers.
La firma del pacto estuvo encabezada por Donald Trump y Keir Starmer, quienes destacaron el carácter estratégico y transformador de la iniciativa, acompañados por ejecutivos de gigantes del sector y representantes de grupos financieros.
El acuerdo tiene como objetivo fortalecer los lazos económicos y tecnológicos entre ambos países, con proyectos que abarcan energía nuclear, inteligencia artificial, computación cuántica y manufactura avanzada.
Según informó Keir Starmer, la implementación del pacto generará alrededor de 15.000 empleos en el Reino Unido, lo que supone un impulso directo a la economía local y a la cooperación bilateral.
Durante la ceremonia, Starmer subrayó que la llegada de empresas tecnológicas estadounidenses al territorio británico refleja la llamada “relación especial” entre ambos países, resaltando que la inversión no solo beneficia a la economía, sino también a los ciudadanos.
Por su parte, Donald Trump destacó la fuerza de los vínculos históricos y culturales que unen a Estados Unidos y el Reino Unido, calificando la relación como “eterna e inquebrantable”.
El paquete de inversión incluye compromisos específicos de importantes corporaciones. Blackstone, el fondo de capital riesgo, invertirá 100.000 millones de libras en infraestructura y energía limpia durante la próxima década.
Por su parte, Prologis destinará 3.900 millones de libras a la expansión de un campus biomédico en Cambridge y a la modernización del puerto seco de Daventry.
Palantir aportará 1.500 millones de libras para reforzar capacidades de análisis de datos y seguridad, mientras que Boeing trabajará en la adaptación de dos aviones 737 para la Fuerza Aérea estadounidense en Birmingham, una operación sin precedentes en medio siglo en territorio británico.
La inversión también contempla compromisos de empresas británicas en Estados Unidos, con firmas como GSK, BP, Sage y Revolut, que movilizarán más de 33.000 millones de libras en proyectos tecnológicos y energéticos.
Además, se anunció el Acuerdo de Prosperidad Tecnológica, que movilizará más de 31.000 millones de libras en inteligencia artificial, energía nuclear y computación cuántica, con la participación de gigantes tecnológicos como Microsoft y Google.
El acuerdo nuclear, otro componente central de la alianza, refuerza la cooperación en energía limpia y segura, garantizando el suministro a largo plazo y fomentando la innovación en tecnologías sostenibles.
Trump y Starmer coincidieron en que la unión de capacidades científicas, industriales y financieras entre Estados Unidos y el Reino Unido posiciona a ambos países como líderes globales en tecnología avanzada.
Este histórico pacto marca un hito en las relaciones bilaterales y demuestra la relevancia estratégica de combinar inversiones masivas con objetivos de innovación tecnológica y desarrollo económico.
