El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió este miércoles que cualquier plan que implique el desplazamiento forzoso de la población palestina en la Franja de Gaza constituiría “limpieza étnica” y representaría una violación grave del derecho internacional.

La declaración surge luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sorprendiera al anunciar una propuesta en la que su país asumiría el control del enclave tras el traslado de cerca de dos millones de palestinos. 

“Si buscamos soluciones, no debemos empeorar los problemas. Todo desplazamiento forzoso de poblaciones equivale a limpieza étnica” destacó.

“Es crucial permanecer fieles a los fundamentos del derecho internacional”, señaló Guterres en un mensaje transmitido por su portavoz, Stéphane Dujarric, previo a su intervención ante el Comité para el ejercicio de los derechos inalienables del pueblo palestino de la ONU. 

El máximo responsable del organismo internacional también reiteró su respaldo a la solución de dos Estados, uno israelí y otro palestino, como la única vía viable hacia la paz.

Guterres mantiene una relación tensa con el Gobierno de Israel, en particular desde que en 2023 afirmó en el Consejo de Seguridad que los ataques de Hamás del 7 de octubre “no vinieron de la nada, sino de 56 años de ocupación asfixiante”. Desde entonces, el primer ministro Benjamin Netanyahu ha evitado cualquier comunicación con él. 

En paralelo, el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, respondió desde Ginebra a la propuesta de Trump, recordando que “toda deportación o transferencia forzada de personas sin base legal está estrictamente prohibida”. 

La postura de la Unión Europea

La Unión Europea se sumó al rechazo, enfatizando que la Franja de Gaza es una “parte integral de un futuro Estado palestino” y reafirmando su compromiso con la solución de dos Estados. “Para nosotros es la única vía hacia una paz duradera entre israelíes y palestinos”, indicó un portavoz comunitario. 

El plan anunciado por Trump también generó inquietud en la región. Según informó Dujarric, Guterres mantuvo una conversación con el rey Abdalá II de Jordania para analizar la situación, aunque no ha dialogado con el mandatario estadounidense desde que este asumió su nuevo mandato. 

Las declaraciones de la ONU buscan frenar una escalada diplomática que podría profundizar el aislamiento de la población de Gaza, ya golpeada por décadas de bloqueo, conflicto y crisis humanitaria.