La OPS advierte a los asistentes a la COP30 en Belém que revisen sus vacunas y refuercen medidas de salud ante el riesgo de fiebre amarilla y sarampión.
Con la mirada puesta en la COP30, que se celebrará del 10 al 21 de noviembre de 2025 en Belém, Brasil, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) lanzó una advertencia sanitaria a los más de 60.000 asistentes esperados: revisar el esquema de vacunas contra la fiebre amarilla y el sarampión.
El evento reunirá a jefes de Estado, activistas, científicos y representantes de 198 países, en una zona considerada de riesgo por su ubicación amazónica.
La fiebre amarilla, una enfermedad viral grave transmitida por mosquitos, continúa siendo una amenaza para la salud pública regional.
Solo en 2025 se registraron 294 casos y 121 muertes en Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana y Perú. Si bien Belém no reportó casos recientes, su entorno selvático mantiene la alerta activa.
La OPS recordó que la infección puede provocar fiebre alta, daño hepático e incluso la muerte en la mitad de los casos severos.
La organización recomienda que los viajeros no vacunados reciban una dosis contra la fiebre amarilla al menos diez días antes del viaje y la triple viral (SRP) contra el sarampión con un mínimo de quince días de anticipación.
Ambas vacunas pueden aplicarse el mismo día o con cuatro semanas de intervalo. En mayores de 60 años, la inmunización contra la fiebre amarilla requiere evaluación médica por posibles efectos adversos.
Finalmente, la OPS pidió a los sistemas de salud fortalecer la vigilancia epidemiológica durante y después de la COP30, garantizando la disponibilidad de vacunas y atención oportuna ante síntomas como fiebre, erupciones o ictericia. La prevención, destacaron, será clave para evitar brotes durante la cita climática más importante del año.
