El presidente argentino, Javier Milei, reafirmó este jueves el compromiso de su Gobierno con Israel y confirmó que el traslado de la Embajada argentina a Jerusalén se concretará en 2026.

El anuncio lo hizo durante un discurso en el Parlamento israelí, en el que volvió a destacar la relación estratégica entre ambos países y lanzó duras críticas contra el terrorismo palestino y la comunidad internacional. 

“Tengo el orgullo de anunciar ante ustedes que en 2026 haremos efectiva la mudanza de nuestra Embajada a la ciudad de Jerusalén Occidental como lo prometimos”, señaló Milei, bajo la mirada del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, con quien había mantenido un encuentro en la víspera. 

El mandatario recordó que Israel es, junto con Estados Unidos, el “socio estratégico más importante” de Argentina. “Argentina fue de los primeros países en reconocer el Estado de Israel”, subrayó, en un mensaje de fuerte respaldo político y diplomático. 

Durante su intervención, Milei dedicó varios pasajes a cuestionar a Hamás, al que calificó de “organización salvaje y terrorista”. “Con el ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023, el pueblo israelí ha sido víctima de la agresión más aberrante de los últimos 80 años, y todo el mundo libre ha sido testigo del rostro de la más abyecta barbarie”, afirmó. 

El avance del antisemitismo

El presidente argentino también advirtió sobre el resurgimiento global del antisemitismo: “Junto al avance del terrorismo barbárico, la oscura y antigua sombra del antisemitismo se vuelve a extender como un cáncer por el mundo contemporáneo”.

En ese contexto, criticó a los organismos internacionales por dejarse “manipular” por lo que definió como la “propaganda terrorista” de la milicia palestina. 

Milei planteó un dilema moral a la comunidad internacional: “Urge que el mundo libre se reencuentre con su brújula moral. Y finalmente se decida: ¿prefiere estar del lado del terror o del lado de la libertad? ¿Prefieren la vida o la muerte? ¿El bien o el mal? Para decidir, basta simplemente con remitirse a los hechos”. 

La decisión de trasladar la Embajada ha generado cuestionamientos desde la Autoridad Palestina y otros grupos árabes, dado que Jerusalén Este permanece bajo ocupación israelí desde la Guerra de los Seis Días de 1967. Pese a que Israel considera la ciudad como su capital unificada, la mayoría de la comunidad internacional no la reconoce como tal y defiende la solución de dos Estados, con Jerusalén como capital compartida. 

Con este anuncio, Milei refuerza su alineamiento con Washington y Tel Aviv, situando a Argentina en un reducido grupo de países que reconocen de manera oficial la capitalidad israelí en Jerusalén.